Desventuras pasaron, un ínfimo y sacrílego llegar
turbó al comediante vívido en su asiento,
era un palpitar estrecho e idolatrado,
como hace añares que no ha probado..
Flirteó por sobre sus ojos manzana,
sus brillares tediosos y su mirar preocupado.
Encadenadas solturas espetó un animal,
relajado, ya conforme, mantuvo una blanquecina
forma de digerir un mutuo conocerse.
Brebaje oscuro sirvió de artefacto,
mas cierta finura tan celestina pareció
enebrar agujas y de una vez
conformar sus agujeros con una tibia cosedura.
Tan solo espejismo en caminares quizá,
lagunas color azulino parecen verter
un conocer absoluto y bonito,
por sobre ese laser cetrino que es el acariciar
con miradas de lobo a esa plateada luna mujer...
En segundos contados, en mirares,
dormita vagabundo un corazón,
hasta que dos dicen irse
y la suave bestia sigue caminos,
la oscura noche recién conocida
se esfuma en fiestas
y cierto aflorado danzante
turbado cree sentir
un plenario maravillar por fin..
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